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Pero ¿Cuál es la diferencia entre estas dos?
Alguien popular es admirado y aceptado dentro de determinado grupo de personas. Con respecto a la popularidad o la fama 1 Pedro 1:24 dice:”todo mortal es como la hierba, y toda su gloria como la flor del campo; la hierba se seca y la flor se cae…”
La fama y la popularidad se acaban, pero la palabra del Señor permanece para siempre.

Respecto a la prosperidad la biblia nos muestra que es tener fruto, tener éxito en todo lo que hacemos. Es avanzar por encima de los obstáculos, es progresar. La senda del justo es como la luz de la aurora que va en aumento, eso es prosperidad. La prosperidad está ligada a lo que dice la Palabra.
Pero la popularidad está ligada a lo que la gente dice acerca de nosotros.
Según el Salmo 1 al meditar de día y de noche la palabra de Dios hará que llevemos fruto y que todo lo que hagamos prospere.

La popularidad es pasajera; la prosperidad es permanente.
También en el ámbito de la música, hay canciones populares que están de moda. Pero luego están las canciones que son inolvidables que han pasado la prueba del tiempo. Canciones que no pasan de moda.

Vemos iglesias también que han sido solo del momento, semejante a construir sobre la arena, es decir, la fama y la popularidad. Pero otras han pasado la prueba del tiempo, la prueba de fuego, han edificado sobre la roca y seguirán pasando de una generación a la siguiente.

El problema con la popularidad es que nos desvía de nuestro objetivo porque nos enfocamos en lo pasajero y no en lo permanente.

En la biblia encontramos que Jesús no quiso popularidad sino prosperidad. Nos hemos puesto a pensar ¿porque Jesús luego de hacer algún milagro le decía a la gente que no lo anunciaran? Jesús no quería popularidad y ¿saben por qué?
Por que él vino a edificar una iglesia, él no vino aquí a montar un espectáculo, a tener un evento pasajero.

La prioridad de Jesús era formar a sus discípulos. Mateo 16:18 dice: “…y sobre esta piedra edificaré mi iglesia, y las puertas del reino de la muerte no prevalecerán contra ella.”
El problema con la popularidad es que nos desvía de nuestro objetivo porque nos enfocamos en lo pasajero y no en lo permanente.

El mismo Jesús fue tentado por el diablo cuando le dijo: “todo esto te daré si te postras y me adoras”, es decir, fama y popularidad.
El mundo se acaba con sus malos deseos, pero el que hace la voluntad de Dios permanece para siempre.

Existen dos personajes bíblicos que podrían representar la popularidad y la prosperidad. Se trata de Sansón y Daniel.

Sansón fue más popular peros su éxito solo duro 20 años. Pero Daniel fue un hombre exitoso durante toda su vida. Gracias a su fidelidad fue prosperado.
El predicar un mensaje acerca de la santidad no nos hará necesariamente populares, pero es lo que nos hará prósperos para la gloria de Dios.

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1901 Personas se interseraron en esta Predicación